No hay día en el que no piense en lanzarme por la ventana

"¿Miedo a enfermarme de Coronavirus y morir? Pero si eso es lo que quiero: morirme, irme de una vez de este mundo. No hay día en que por la mañana despierte y no piense en lanzarme por la ventana del segundo piso, pero hay una fuerza que me detiene y dice: 'No, así no, no en esa forma'. Esa fuerza tal vez es el recuerdo de mis días mejores, cuando desde muy niña aprendí a valerme por mi misma, cuando me divorcié y sola me hice cargo de mis hijos, cuando tenía que ponerme boca a boca con todo aquel que quería pasar por encima mío; me sentía muy orgullosa de quien yo era, ¿cómo terminar estrellada contra el piso después de todo eso que he vivido? Pero ahora y apenas puedo ver, se me van olvidando las cosas y debo hacer esfuerzos para no perderme en la calle y recordar el camino a casa. Si me quedo encerrada en casa me vuelvo loca, a estas alturas de mi vida el trabajo es lo único que me consuela." (Lima-Perú)