"Muchas cosas en mi vida he conseguido porque alguien más me ha ayudado. Haber ido a la universidad, independizarme o cualquier otro proyecto loco que tenía, siempre se ha dado porque han estado ahí mi familia y amigos para darme la mano. Poco hubiera conseguido sin ellos, ¿por qué entonces no hacer yo lo mismo?, ¿por qué no verme en los otros y ayudar a hacer de sus vidas algo mejor? Ya me decidí: brindaré asesoría legal gratuita a poblaciones vulnerables. Ahí afuera hay muchos niños cuyos padres no los han reconocido, madres solteras que no tienen los recursos para hacer justicia. Ellos son como los miserables de una sociedad, viven al margen de muchos derechos que les corresponden como personas. Mi plan es visitarlos una vez por semana para llevar sus casos de manera gratuita. Iré a los lugares donde la televisión ni la prensa llegan, y los recursos los sacaré de mi bolsillo, de eventos benéficos que pueda organizar y donaciones de quienes crean en la causa. Las personas podemos hacer muchas cosas para nosotros mismos, como ir a la universidad, comprarnos el carro o construir nuestra casa. Pero en algún punto ni eso alcanza para sentirnos bien con nosotros mismos. Solo algo cambia cuando la sonrisa se comparte. Míralo desde un punto egoísta, si así te parece, pero ayudar a los demás es una forma de ayudarse a sí mismo.” (Lima-Perú)
